El delantero se retiró de la práctica con molestias, pero tras los estudios realizados se descartó cualquier tipo de lesión y finalmente será tenido en cuenta contra Lanús.

En la distendida jornada que se estaba llevando en la primera cancha de Casa Amarilla, Claudio Riaño debió retirarse por un traumatismo en su aductor izquierdo. Pero para fortuna de Bianchi y el cuerpo médico, el delantero no tiene nada grave y estará disponible para el choque de mañana.

Todos lo daban por descartado, hasta se habló que el pibe Francesco Celeste iba a ocupar su lugar en la concentración. El cordobés se realizó estudios y descartó cualquier tipo de desgarro, como ya se estaba contando.

Una buena noticia para el “Virrey”, que aún no sumó el lesionado 57º de este terrorífico año.