Boca quiere repetir o incluso mejorar lo realizado en la última temporada y en el primer semestre del 2023 disputará varias finales. Con la última etapa de la pretemporada en Ezeiza, el cuerpo técnico analizó el plantel actual y sacó sus conclusiones, previo al arranque de la actividad oficial. 

Dentro de sus deducciones, una de las necesidades es la contratación de un defensor y con la salida de Carlos Zambrano, se convirtió en una urgencia. A esto se suman la lesión de Marcos Rojo, ausente para el primer semestre y algunos rendimientos irregulares que no terminan de convencer. 

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Al igual que en las últimas temporadas, el puesto de marcador central se volvió un problema y para este año, buscarán sumar dos zagueros más, como informó el periodista Julio Pavoni. Con muchos juveniles como alternativas en ese sector, el club ya hizo gestiones que no tuvieron un buen desenlace como Walter Kannemann o Adonis Frías.  

Por el momento, las opciones que se encuentran en carpeta son las de Lucas Merolla y Nazareno Colombo, aunque estas dos negociaciones siguen sin avanzar. Y un dato que llamó la atención de muchos es que el Xeneize estaría interesado en contratar un 9.  

Lo más resonante de esta decisión es que el entrenador ya cuenta con cuatro jugadores a disposición como Darío Benedetto, Nicolás Orsini, Gonzalo Morales y Luis Vázquez. Este último ya recibió ofertas durante el 2022 y no sería descabellado que una nueva propuesta llegue a las oficinas del Consejo de Fútbol, motivo por el cual se toma esta nueva determinación de reforzar el ataque.