La noche del martes será especial en la Bombonera. Por lo que significa la Copa Libertadores en sí, por el buen ánimo que hay en la Ribera después de la clasificación a la final de la Copa de la Liga y, claro está, por la expectativa que genera un cruce ante un conjunto brasileño.

Luego del importante triunfo en la altura de La Paz frente a Always Ready, el Xeneize enderezó el rumbo en el Grupo E, pero sabe que todavía no está nada dicho. El pasaje a octavos de final del certamen no está tan lejos como antes, aunque lo ocurra ante Corinthians será determinante para encarar las últimas semanas del semestre.

Sebastián Battaglia no guarda nada y repite a la mayoría de los futbolistas que eliminaron a Racing, el pasado fin de semana en cancha de Lanús. Salvo los que están suspendidos por Conmebol, el resto serán los de siempre: Agustín Rossi, Marcos Rojo, Alan Varela, Pol Fernández, Darío Benedetto y Carlos Izquierdoz, quien limpió la sanción y debutará en la actual edición.

Un triunfo contra el Timao pondría a los de la Ribera con un pie y medio entre los mejores 16 clubes de la Copa. Si hablamos de resultados, el empate tampoco tendría sabor a poco y una derrota, algo en lo que se piensa poco, tampoco cambiaría demasiado los planes: en caso de que esto último ocurra, alcanzará con vencer a Deportivo Cali en la última jornada. Sin embargo, en Brandsen 805 saben que es un buen momento para consolidarse no solo desde lo numérico, sino también desde el juego. Lo de siempre: nada será más importante que el tanteador, pero las formas importan.