Eso disparó Bermúdez contra sus dos ex compañeros, por la manera en que se expresaron ante los micrófonos. Te mostramos lo mejor.

Jorge Bermúdez volvió a ser duro con la realidad de Boca, ahora particularmente a la situación entre Martín Palermo y Juan Román Riquelme, especialmente a las declaraciones cruzadas entre el Titán y Marcelo Delgado, amigo del enganche.

En diálogo con el Diario Crónica, manifestó:

Me da vergüenza lo que hicieron Palermo y el Chelo. Me dio pavor porque con lo que dijo no le hizo bien ni a Palermo ni a Riquelme, más allá de que pretendió defender a su amigo.
Todo depende de la clase de jugadores que haya. De lo profesionales que son. Y cuando hablo de profesionales significa que el grupo está por encima de los individuos. Por eso, lo que siento desde la distancia es la falta de un líder positivo, que sepa absorber estas diferencias, que los problemas se resuelvan dentro de un vestuario y que nada más salga de ahí.
En el 2000 el grupo no se dio cuenta. Mejor dicho, sabíamos que había dos grupos pero no sabíamos que las diferencias eran tan profundas.

Además, el Patrón expresó que esto no debe traducirse a lo futbolístico:

Hay que tirar para el equipo, sin necesidad de estar bien todo el día con el compañero. Uno no tiene que chocar con el otro. No pasa por vivir juntos. Pasa por entregar todo por el equipo. Lo que hay que lograr es que el compromiso con el grupo sea mucho más grande que el ego personal. Me sentí muy triste. Son jugadores grandes, con experiencia y que le han dado mucho al club, creo que se han manejado muy mal.

Sobre la elección del DT y su deseo de ocupar ese puesto, afirmó:

Ya llegará el momento para mí, me siento capacitado para ser el técnico de Boca. El entrenador tiene que ser alguien que ayude a vivir día a día con las diferencias.
Hay que pensar que lo más importante es el equipo y no los intereses personales. Antes de arreglar con algún entrenador, la dirigencia tendría que sentarse con ellos. Haría muy mal al club que los dirigentes contraten a un técnico y que alguno de ellos dos se manifieste en contra.