Boca cayó por 1 a 0 ante Vélez y quedó afuera de la Copa Sudamericana. El equipo no se levanta y Basile se quedó sin el porcentaje perfecto de torneos ganados, que mantenía hasta hoy.

Partido tras partido se renueva la esperanza y, tras noventa minutos, vuelve a derrumbarse. Este Boca está caído, intenta levantarse y trastabilla. Las armas las tiene, eso no hay duda, pero parece no saber cómo usarlas. Cuenta con el mejor plantel de toda la Argentina, con jugadores con clase, con experiencia y juventud, con un gran técnico, pero las piezas no encajan.

¿Será buena esta eliminación? A priori podemos decir que no, que es un equipo grande y que tiene con qué afrontar ambas competiciones pero… ¿realmente tiene con qué?. La no pretemporada realizada por el Xeneize le está jugando una mala pasada. Eligieron participar de una gira por Europa, antes que prepararse para las dos competiciones que tenía este semestre. Las lesiones y el agotamiento general demuestran que Boca no está en condiciones, físicas obviamente, de pelear ambos torneos.

El conjunto de Basile no se encuentra, no sabe para dónde ir o qué hacer. Las dudas defensivas son una constante desde hace ya mucho tiempo y los rendimientos individuales no son los esperados, ni mucho menos. Hoy hubo una gran actuación de Abbondanzieri, un cambio muy importante en relación a lo que venía mostrando. Se vieron algunas ráfagas de buen fútbol entre Insúa y Román, contadas corridas de Noir y no mucho más para destacar en el primer tiempo. Boca tuvo ciertas chances de abrir el marcador, por ejemplo en los pies de Battaglia, pero siempre se vio superado por Vélez, que chocó varias veces ante grandes respuestas del “Pato”.

El conjunto de Liniers manejó el partido a su merced, más todavía cuando Cristaldo logró el 1 a 0 definitivo. Las grandes ventajas que daba la defensa de Boca eran aprovechadas por Moralez y compañía para mostrar el juego que mejor saben. Impotente, el equipo del “Coco” corría sin sentido intentando contrarrestar el “goce” velezano. La expulsión de Palermo, por una entrada fuerte ante Papa, es el mejor reflejo del momento que se está viviendo.

A Boca se le viene Godoy Cruz como local el domingo, un partido duro (hoy en día jugar hasta con Atlas es complicado para este equipo) y un rival que juega bien. Imploro, rezo y pido a todos los Dioses que los jugadores nos brinden, como sea, un triunfo. Haganlo por Delpo, que va a estar en la tribuna, haganlo por todos los hinchas: ganen este domingo.