Claudio Morel Rodríguez tuvo una actuación sobresaliente ante San Lorenzo, su ex club. Jugó un partido casi sin fisuras y volvió a ser clave en un Boca que no recibió goles.

Enchufado desde el primer minuto, lo jugó como una final. Siempre tiene un gustito aparte para Morel enfrentar a San Lorenzo, o por lo menos así lo demuestra en el campo de juego.

Ordena, barre, juega y, cuando la ve complicada, la despeja sin ponerse colorado. El paraguayo se mostró muy firme en la defensa Xeneize y fue una seguridad para Tito Pompei.

Sus salidas limpias poniendo el cuerpo bien pegado a la banda, son una marca registrada. Así como también lo son sus patadas karatecas para despejar la pelota, cuando esta le queda en un perfil incómodo para su zurda.

Boca volvió a tener la valla invicta como local, al igual que ante Arsenal, y Morel fue gran responsable de este logro. Pudo complementarse bien con Muñoz y siempre se mostró seguro a la hora de tener que relevar a los laterales, ya sea por derecha como por izquierda.

El paraguayo terminó el partido y el parte médico indicó esguince de rodilla. ¿Llegará al partido ante Independiente o lo verá desde afuera? Esperemos, por el bien del equipo, que se recupere y juegue.

Parecería ser que el zaguero está jugando sus últimos partidos en Boca porque se le vence en contrato en junio. Su sueldo es de los más elevados… pero ¿no van a hacer un esfuercito por retener a Morel? Ring, ring, ring.