El volante surgido en Boca recordó qué era lo que enojaba al ídolo dentro de la cancha.


Juan Román Riquelme, uno de los grandes ídolos del club, ha contado con varias etapas en el Xeneize y en una de las últimas compartió plantel con una buena cantidad de juveniles que se formaron en las divisiones inferiores.

Dentro de estos casos podremos nombrar a Leandro Paredes, Luciano Acosta, Federico Bravo, entre otros. Justamente, este último brindó su testimonio en una entrevista con “¿Cómo Te Va?” y recordó sus primeros pasos como profesional, vistiendo la camiseta azul y oro.

El mediocampista de 27 años regresó al fútbol argentino para defender los colores de Sarmiento de Junín, luego de su etapa por Riga de Letonia. En su testimonio, rememoró algunos episodios con el actual vicepresidente segundo y además de elogiarlo por su trayectoria, mencionó uno en particular:

“Román era un jugador diferente, que las pedía todas, a veces cuando no se la dabas a él se enojaba. Me decía ‘mira para aquel lado que me dejan solo’. Uno aprendió mucho de él, porque es una figura, un referente”.

Haciendo referencia a tiempos contemporáneos, el volante hizo hincapié en la cantidad de juveniles que tuvieron una oportunidad en el equipo comandado por Miguel Ángel Russo:

“Me puso muy contento ver a jugadores juveniles en el equipo titular de Boca, es muy difícil llegar y como uno de los juveniles que estuvo en la pensión me pone muy contento. Los juveniles siempre están mirando si el entrenador de primera le da posibilidades a los jóvenes y esto es una motivación muy grande contra ellos”.