Un Boca alternativo cayó en el amistoso ante River por 1-0. El equipo recibió el gol casi de entrada y no pudo generar peligro como para remontarlo. Monzón se fue expulsado y hubo una jugada polémica entre Chiarini y Magallán.

El primer golpe lo dio River: una gran jugada colectiva evidenció los errores de la defensa del Xeneize y Luis González abrió el marcador. Así, el duelo se hacía cuesta arriba desde el arranque para Boca, que a los ocho minutos ya perdía.

La respuesta del conjunto azul y oro llegó a los 25 y con polémica: en un tiro libre, Magallán ganó de arriba y su cabezazo dio en el travesaño. Pero la acción reclamada por el Cuerpo Técnico fue una falta del arquero Chiarini al defensor.

Sin embargo, llegó otra mala noticia para los de Arruabarrena: a los 28 minutos, Luciano Monzón vio la tarjeta roja por una fuerte falta. El Xeneize se quedaba con diez y debía rearmarse.

Así, Fuenzalida pasó a la defensa y se improvisó un 4-3-2. En este sentido, el equipo reaccionó bien y no permitió que se note el jugador de menos. Pero a pesar de eso, le costó mucho generar juego y llegar con profundidad.

Esa tónica se trasladó al complemento, donde se vio poco y nada. Sólo un remate de Chávez que se fue cerca pudo generar alguna emoción. El ritmo general del partido decayó y costó destacar alguna otra acción. El “Vasco” mandó a Cristaldo y Palacios a la cancha en lugar de Meli y Pavón, pero nada cambió.

Fue derrota para un Boca plagado de suplentes. Ahora el plantel regresa a Buenos Aires y comenzará la semana previa a una cita más que importante: la visita a Racing donde, si se dan los resultados, puede dar la vuelta.