2 años de ¿fútbol?

Un pequeño resumen donde mostraremos los resultados obtenidos a partir del 2009. Nada queda de aquel Boca campeón de Ischia.

Tras salir campeón en el Apertura 2008, Boca iniciaba el 2009 con muchas esperanzas. Volvía el “Pato” Abbondanzieri, Palermo y Palacio ya estaban totalemente recuperados de sus lesiones y se sufría la baja de un jugador vital en aquel campeón: Jesús Dátolo.Fue un semestre muy flojo. Poco esperado para los hinchas. Ischia no logró remontar la campaña como lo había logrado unos meses antes. El equipo no tenía alma, y los números lo reflejaban.

Boca terminó decimocuarto con tan solo 22 puntos cosechados, producto de seis victorias, cuatro empates y nueve derrotas. Recibió más goles que los que marcó (22 a favor y 25 en contra) y el goleador de Boca fue Palermo, con 7 conquistas. Un ejemplo para que vean de lo que hablo: Rodrigo Palacio y Facundo Roncaglia jugaron 12 encuentros y ambos hicieron 2 goles. Eso que son posiciones distintas…

La ilusión se renovaba. Volvían dos tipos muy queridos por el club, como Basile e Insúa. Se sumaban Medel, Gunino, Rosada y Marino. Sucedió algo muy parecido al semestre anterior. Un equipo que en la cancha no volcaba nada. Basile amagó con renunciar varias veces, pero lo convencieron de seguir. Boca se ubicó en la undécima posición con 27 puntos. Se obtuvieron siete victorias, seis empates, y también seis derrotas. Un año para el olvido.

Lo más triste de todo, es que pensamos que en un nuevo año, las cosas iban a cambiar. No nos dábamos cuenta que Boca estaba pasando por una crisis institucional y que, de una manera u otra, esto se demostraba en cancha.

En 2010, Basile y Bianchi se van. Llega Méndez, nadie quiere agarrar a Boca. ¿Conclusión?, se apuesta por un interinato a cargo de Abel Alves. Fue el peor campeonato corto del club en la historia: Boca ocupó la decimosexta ubicación en la tabla de posiciones, con escasos 20 puntos. Se cosecharon cinco victorias, cinco empates y nueve derrotas. Increíble. Alves aguantó hasta la fecha 13, y Pompei se hizo cargo del equipo. Pésima producción del equipo, sobretodo en defensa: 35 goles en contra. A esto hay que sumarle la ida del Pato Abbondanzieri (al Inter de Porto Alegre), relegado por Alves. Buen torneo de Gaitán, que luego sería vendido al Benfica a mitad de año.

Este semestre más de uno se esperaba otro final de campeonato y por muchos motivos. Boca incorporó a: Cellay, Caruzzo, Insaurralde, Escudero, Lucchetti y Clemente Rodríguez. Y el último DT Campeón del fútbol argentino, Claudio Borghi, venía al club a tratar de torcer el rumbo. Sin embargo, todos sabemos como empezó y como terminó la cosa. Borghi jamás logro encontrar el equipo. Se imploraba por la vuelta de JRR, pero tampoco se lo quería apurar.

Malos rendimientos, pobre preparación física y flaqueza defensiva son algunas de las cuestiones que se le criticó al “Bichi”. No aguantó, y tras perder con River se fue, dejando a cargo una vez más a Pompei. Boca terminó undécimo y consiguió siete victorias, cuatro empates y ocho derrotas (4 de local).

Se necesita un cambio urgente de identidad. Esperemos que nuestro próximo DT tenga la receta justa…