El programa Triple Xeneize (lunes a las 22 por Mundo Sur FM) dialogó anoche con Federico Van Lacke. El escolta de Boca contó como ve al equipo hasta el momento, que hay que mejorar y como es su adaptación a la Liga Nacional.
– ¿Cómo viviste el partido con Lanús?
– Fue un poco trabado, sobre todo para nosotros la mayor parte del juego. Donde ellos sacaron una diferencia al iniciar el partido, y nos costó a nosotros encontrar nuestro ritmo. Pero poco a poco fuimos sintiéndonos más cómodos y pudimos alcanzarlos en el marcador. Para el final lo pudimos cerrar a nuestro favor, con una renta de cinco o seis puntos que nos permitió cerrarlo más tranquilos y más cómodos de lo que pensábamos.
– ¿Con estos seis partidos jugados, ¿cuál es tu balance? ¿Qué es lo que más te gusta del equipo?
– Yo creo que el balance es positivo, más que nada por el tiempo de trabajo que llevamos juntos. Sabemos que somos ocho o nueve jugadores que llegamos nuevos esta temporada, con entrenador nuevo, y eso requiere tiempo de trabajo para que empiece a dar resultados. Aún así hemos conseguido partidos importantes: empezamos muy bien, con Peñarol, ganando en una cancha tan difícil al último tricampeón. Creo que tuvimos errores, como fue el partido con 9 de Julio o Argentino de Junín, donde quedó claro que el equipo tenía muchas cosas que mejorar. Esa falta de conocimiento por momentos nos pasó factura, porque el hecho de jugar partidos tan apretados donde muchas veces el juego de equipo no es lo principal, sino la lucha física. Creo que eso fue lo que más nos pesó, lo que no nos hizo sentir cómodos y no nos dejó salir con victorias. Pero creo que el balance es positivo, estamos trabajando muy bien. Cada día cada jugador va encontrando su lugar dentro del equipo. Y Néstor García va aplicando mejor su filosofía de juego para que la ejecutemos dentro de la cancha.
– ¿Qué crees que haya que mejorar a nivel equipo?
– Lo más urgente es le tema de las pérdidas. Creo que los dos partidos que perdimos hasta ahora tuvimos más de 20 pérdidas como equipo. Eso genera no atacar, o no llegar al aro; y al equipo contrario atacarte rápido o llegar con puntos rápidos. Eso es lo más urgente. Después tenemos un montón de cosas, que son detalles, para mejorar. También podría poner como énfasis es que el equipo siempre defienda con el nivel que lo hizo hasta ahora. Creo que fue el día con Argentino el que más puntos nos hicieron, y más daño nos hicieron. Pero los demás prácticamente estuvieron todos los equipos en 70 puntos o menos Eso creo sería una de las armas fundamentales que tiene que tener el equipo.
– ¿Cuál es el Van Lacke que vamos a seguir viendo? Hasta ahora te vimos polifuncional.
– Es un poco esa mi forma de jugar, después de diez años en España fui sumando cosas a mi juego. Es el estilo de jugador europeo, donde uno no se puede focalizar en una sola faceta de juego. Sino que, si querés perdurar en una liga tan competitiva como la Española, tenés que cada día aportar cosas nuevas a tu juego. Si bien cuando me fui hace diez años era solo un anotador con poca defensa, cada año fui evolucionando en distintas facetas de juego. Hoy me consideran un gran defensor que puedo tirar, penetrar, pasar y agarrar rebotes. Puntos bajo que por ahí antes tenía y fui mejorando durante mi carrera. Hoy me encuentro con esta polifuncionalidad que me da la posibilidad de estar muchos minutos en cancha aportando cosas para el equipo, dando soluciones al entrenador. Para lo que el equipo necesite yo voy a estar ahí ayudando. Nome encasillo en una tarea sola, sino que puedo aportar en varias cosas. Soy conciente también que la defensa es lo que nunca puede fallar; algún día meteré mas o meteré menos, pero se por lo que aprendí que la defensa es saber y querer el juego. Eso siempre me funciona y me da bueno resultados.
– ¿Cómo te está resultando la adaptación a la Liga Argentina?
– Hasta el día de hoy bien. Me voy sintiendo cada día un poquito más cómodo. Por ahí me cuesta más el roce físico, que allá en España no se puede tocar a nadie. Acá te ponen todo lo que tiene en el alcance para poder frenarte. Es un poco lo que me cuesta, o trato de no descentrarme demasiado. Pero esa sería la mayor diferencia que noto a la horade jugar; lo demás es todo lo mismo.
– ¿Qué te parece que le falta a Daniel Santiago para adaptarse a la Liga?
– Tiempo. Se lo decimos y Néstor se lo repite, es un jugador que para esta liga es imparable, por el tamaño, la capacidad de juego, el talento individual, técnico y táctico es un jugador muy rico. Eso hace que sea tremendamente peligroso para todos los rivales. La forma por ahí de frenar a un jugador de 2.16 con esas características por ahí es pegándole, haciéndoles falta para que él se vuelva loco. Son cosas que él tiene que entender; es una liga donde los jugadores les gustan más el roce. También es un jugador que nos da muchas soluciones a nosotros. Desde el día que llegó nos abrió la cancha, nos da potencia interior, le abre mucho el juego a John DeGroat y todos aprovechamos su presencia dentro del equipo y dentro de la cancha.
