Salta vive horas felices gracias a la llegada de Boca, que esta noche buscará el pase a cuartos de final de la Copa Argentina frente a Agropecuario en el estadio Padre Martearena. El resultado del partido será importante, pero no tanto como para opacar la fiesta que hicieron los norteños al tener a sus ídolos cerca.

El plantel se mostró cerca de la gente y los jugadores firmaron autógrafos, además de sacarse fotos en el momento de la llegada y luego de la cena. Con Pol Fernández y Alan Varela, dos de los capitanes del equipo, a la cabeza, la delegación xeneize le devolvió un poco de cariño a quienes nunca fallan.

Lo que empezó con el acampe para conseguir una entrada, terminó con una enorme fiesta en las adyacencias del Hotel Sheraton. Sergio Romero tenía razón: no hay club más grande en la Argentina que Boca.