Increíblemente, parece ser que la culpa del mal momento que está pasando Boca, según algunos, es de Juan Román Riquelme y Martín Palermo. Un nuevo capítulo de esta campaña mediática contra los ídolos del club.

Uno se convirtió hace poco en el máximo goleador del club, el otro está jugando por el sueldo mínimo. Ambos le han dado muchísimo a Boca en estos últimos diez años. Son dos profesionales, pero nos quieren hacer creer que restan, que se pelean, que comen separados, que no se miran, que dividen el plantel y hasta han llegado a decir que Román es un mal ejemplo para los pibes de inferiores. ¿Realmente nos tenemos que creer esto?

Mientras tanto, la dirigencia contrata a una empresa que nos mancha la camiseta, le vende entradas a los turistas a 400 dólares cada una, cierra las boleterías y los no socios se quedan sin ver al club que aman… Vende jugadores a precios altísimos y trae las sobras de equipos inferioresDeja de apoyar a Basile -quien nos dio cinco títulos en dos años- para poner al experimentado técnico de reserva, inicia una campaña contra Bianchi -uno de los máximos ídolos del club- porque no acepta trabajar con ellos (por algo será) y hasta le hacen afiches en su contra… Más las preferencias de algunos que se traducen en diferencias entre los directivos. ¿Pero a quién le interesa? Vende más decir que Boca es un cabaret y los protagonistas principales son los máximos referentes que tenemos hoy.