El jugador del Valencia, paró a cargar nafta y se olvidó de poner el freno de mano. Su propio auto le fracturó la tibia y peroné de su pierna izquierda. En las próximas horas será operado.

Insólita lesión. Seguramente, lo que le pasó a Éver Banega, quedará como una de las lesiones más inoportunas de los últimos años.

¿Qué pasó? Luego del entrenamiento, Banega fue a cargar nafta y se olvidó de poner el freno de mano. El auto se le vino encima y terminó pisándole su pierna izquierda, lugar en donde sufrió la fractura la tibia y peroné.

El volante será operado en los próximos días, en el Hospital Nou D’Octubre de Valencia. El cuerpo médico del club español ya confirmó la lesión y se estima que estará seis meses fuera de las canchas.