Cada vez que Darío Cvitanich anotó un gol, Boca no perdió. El delantero ya suma tres tantos en el Torneo Clausura y se perfila para ser uno de los máximos goleadores del equipo.

Los delanteros de Boca atraviesan por un gran nivel futbolístico y pelean día a día, en una sana competencia, por ver quién se queda con el puesto titular. El ejemplo perfecto de esta situación parece ser Darío Cvitanich, quien volvió de una lesión y le demostró al entrenador que tiene que estar entre los once.

El buen presente del atacante hizo que Julio César Falcioni, hombre que conoce y mucho al jugador, relegue a Pablo Mouche, de buen campeonato, y mandé a la cancha al oriundo de Baradero para que sume minutos de fútbol, luego de su desgarro. Y el ex Banfield pagó con buenas actuaciones, y con lo más importante para un delantero: goles.

Las estadísticas avalan al delantero, ya que cada vez que se encontró con el gol, Boca no perdió. La única vez que el conjunto de la Ribera no ganó y el jugador convirtió fue contra San Lorenzo (1 a 1), en  la fecha 4 del Torneo Apertura 2011.

Cvitanich suma 8 goles con la camiseta de Boca, y sacando el partido mencionado arriba, cada vez que anotó, el Xeneize se llevó los tres puntos: Godoy Cruz, Banfield (2), All Boys (Apertura 2011); Olimpo, Newell´s  y Argentinos Juniors (Clausura 2012).

Su préstamo vence a mitad de año y los dirigentes tendrán que decidir si siguen contando con los servicios del jugador o no. ¿Se quedará?