El ex entrenador de Boca Juniors fue entrevistado por el diario Olé donde hizo referencia a su paso negativo por el club.

Claramente es una de las personas que la gente menos quiere ver por el barrio, nombrarlo está prohibido por los pasillos de la institución, incluso fue catalogado como el peor DT de la historia de Boca Juniors.

Hizo referencia al poco éxito que tuvo en el país argentino donde no solo dirigió al Xeneize, si no también a Vélez Sarsfield:

“Lo que pasó en Boca fue inexplicable”.

“Yo soy muy creyente… ¿Sabés cuántas veces fui a la Iglesia a preguntarle a Dios por qué no salí campeón con Boca? Como 20 veces. ¡Hicimos 44 puntos! De local habíamos ganado casi todo. Pero justo nos llegó el bajón en los dos últimos partidos. Perdimos con Belgrano y Lanús. Y en el desempate, chau…”.

Dejó bien en claro que era imposible su continuidad en el club tras perder el campeonato:

“Por eso antes de esos partidos dije que si no éramos campeones, renunciaba. Yo decía “si pierdo este torneo, me tengo que ir”. No tuvimos suerte, algo necesario en el fútbol”.

“Para mí tuvimos chances en los dos partidos. Quizá con Belgrano se entró un poco relajado. Pero con Lanús ganábamos, nos empataron al final del primer tiempo y en el segundo tuvimos algunas situaciones de gol para ponernos en ventaja otra vez. Y nos hicieron un gol de contragolpe. Me tocó a mí, ¿qué le voy a hacer?”.

Su relación con el plantel de ese momento:

“Pasa que era un plantel que venía de ganar todo con Basile y yo tenía otra idea. Recuerdo que el primer rival era Godoy Cruz. En la previa agarré y les pregunté: “Muchachos, ellos juegan 4-4-2, ¿cómo marcamos?”. Y me contestaron: “Que ellos se preocupen por nosotros”.”

Sobre la frase del helicóptero:

“¡¿Qué error si llegamos arriba al final y jugando bien?! En mi Boca ya no estaban Insúa y Bilos. Me acuerdo de que lo agarré a Marino y le pregunté: “¿Vos sos enganche?”. Y me contestó que no. Entonces lo tiraba a un costado y a Cardozo por el otro, con Gago y Ledesma cerrados. Dos volantes por adentro y dos por afuera.”

Su relación con Riquelme:

“Es que el tiempo me dio la razón. Yo dije que ya nadie jugaba con un táctico o enganche, como le dicen ustedes. Y fijate los últimos campeones… Estudiantes juega 4-4-2, Banfield lo mismo, Argentinos con tres atrás, Vélez no jugaba con enganche… La verdad, el 4-3-1-2 me causa gracia. No existe más en el mundo”.

A mí me quisieron enfrentar con Riquelme. Yo digo que juego sin un enganche porque el doble cinco te lo devora. Pero cómo voy a hablar mal de él. Es uno de los pocos jugadores que sabe qué va a hacer antes de que le llegue la pelota. Pero no podés darle toda la responsabilidad de crear a un solo futbolista. Fijate que después del Mundial 06 renunció a la Selección porque todo el mundo lo había responsabilizado de la eliminación. Yo sí te juego con dos Riquelme…

Sobre las declaraciones de Maradona ante los entrenadores arqueros y Falcioni al mando de Boca Juniors:

“¿Por esa historia de que los arqueros somos locos o boludos? Me río de eso… Mirá Falcioni: salió campeón con Banfield y ahora tiene la linda chance de dirigir a Boca.”

“Tiene una ventaja con respecto a mí. Agarra un plantel golpeado, con sed de revancha. El problema de Boca en los últimos años ha sido la política de refuerzos. Debería reforzarse con sus Inferiores antes que con un jugador que es figura en un equipo chico.”

“El que viene de abajo ya sabe lo que es el club. Y el que viene de un equipo chico está acostumbrado a festejar un córner a favor o a jugar de contragolpe. El problema en Boca es que tapan a los pibes.

La polémica de sacar a Palermo en la actualidad:

“No sé. Yo cuando estaba en Boca me quedaba entrenando con los Mouche, los Franzoia, los Bertolo… Yo sabía que se iba a ir Gago y había que preparar a un Banega. Los jugadores van cumpliendo ciclos. O los vendés o les llegó la hora del retiro. Es así.”

Si ganaba afirma que era el técnico de la selección:

“Y… Si yo salía campeón con Boca, era el técnico de la Selección. No tengas dudas. Te queda el mote de ganador. Le pasó a Basile, se nombró a Russo… Algún día quizá tenga una buena explicación de lo que pasó. De diez torneos, ganaba nueve. Y perdí el único que podía perder.

Aclaro que nunca dialogo con un jugador después de lo vivido en el 2006:


“Nunca. Pero me gustaría preguntarle en qué fallé. Quizás algún día tome un café con alguno…”

Ahora “Richard” se encuentra entrenando el seleccionado de Costa Rica con la ambición de poder llevarlo al Mundial.