¡Festeja todo Boca! Foto: Prensa C.A.B.J.

Todo el análisis de Boca 3-1 Newell’s. A un paso del bicampeonato…

El triunfo ante Newell´s prácticamente definió la Superliga. Si bien es cierto que esta historia parece liquidada desde hace mucho tiempo, las dos derrotas consecutivas le habían puesto algo de suspenso a la definición. El empate de Godoy Cruz ante Banfield no solo evitó que Boca saliera a jugar con presión, sino que le permitió estirar la distancia y acariciar un nuevo título. Con una victoria en La Plata se asegurará el primer puesto y si se dan otros resultados, incluso puede gritar campeón.

El equipo debió afrontar varias ausencias y las sintió: no mostró un gran rendimiento, aunque lo ganó con autoridad. En el arranque cedió el control de la pelota y evidenció problemas para tomar el protagonismo, pero en el complemento se acomodó. Las limitaciones del rival impidieron que sufriera y los tres puntos nunca estuvieron en riesgo, más allá del descuento que achicó la diferencia a un gol. Y las individualidades volvieron a ser determinantes para suplir esa falta de juego colectivo.

La figura de la noche fue Pavón. El incansable delantero -lleva 65 partidos consecutivos como titular- le agregó criterio a su capacidad física y en caso de potenciarlo será difícil imaginar el destino que le esperaCon su desequilibrio generó la acción del primer tanto, en una apilada similar a la que había hecho ante Talleres, y luego liquidó la historia con un tremendo remate. Recostado sobre la izquierda, donde más le gusta. Y con la ovación de una Bombonera que lo despidió como nunca antes.

La difícil tarea de reemplazar a Barrios cayó en los pies de Nández y Sebastián Pérez, con un doble cinco que no funcionó del todo bien en aquel 4-2-3-1. El uruguayo es el único con las características para ocupar ese lugar y el colombiano incluso pudo haber sido expulsado a los dos minutos en una clara muestra de falta de ritmo. El cambio de esquema en el segundo tiempo (pasó a un 4-3-1-2) le dio mayor armonía al equipo, pero nunca hizo olvidar la ausencia del jugador más importante de este plantel.

Como suele suceder, los inconvenientes estuvieron nuevamente en la falta de seguridad de la última línea. Especialmente el arquero y los centrales. En la generación, llama la atención el flojo nivel de Tevez. Y el interesante aporte de Reynoso, con buenas habilitaciones en los últimos dos goles, debe ser constante y no tan intermitente. El doblete de Wanchope le sirvió para ganar confianza en su mejor producción con la camiseta de Boca, criterioso de espaldas al arco y efectivo en la red.

El bicampeonato está a un paso, pero antes del choque con Gimnasia habrá un compromiso clave frente a Palmeiras. En caso de superar a los brasileños y dando por descontada una victoria contra Alianza Lima como local en la última fecha, se logrará la clasificación aun perdiendo en Colombia frente a Junior. Por eso el duelo del miércoles será vital para que los dos objetivos que le quedan en este semestre estén al alcance de la mano. Mientras tanto, el boleto a la Libertadores 2019 ya está asegurado.