Rodrigo Montes tuvo una noche soñada en su re-estreno con la camiseta de Boca. Sí, ya había debutado en Primera pero en una situación completamente excepcional: el plantel profesional estaba aislado y él y sus compañeros de Reserva tuvieron que salir a dar la cara. Ahora, con todas las cartas a disposición, Battaglia le dio la confianza y el juvenil se la devolvió de la mejor manera.

El DT lo eligió para un siempre difícil partido contra Atlético, en Tucumán. Fue parte de con combinado alternativo que consiguió una valiosa victoria. La cuarta en el ciclo de Sebastián Battaglia en seis partido al frente del Xeneize. Fue 2-1 con goles de Lisandro López y del propio Rodrigo.

Montes jugó un gran partido por el sector derecho. Mostró capacidad para asociarse y para cumplir tanto en la faceta ofensiva como en la defensiva, donde fue un factor importantísimo para que Luis Advíncula casi no sufra a lo largo del partido. Como si fuera poco, a los 29 minutos del primer tiempo agarró de lleno un centro atrás de Pavón e infló la red para gritar su primer gol en la Primera de Boca. “Soñado”, tal como lo describió el propio Montes en su charla post partido con ESPN:

“Es soñado, desde chico estoy esperando este momento. Hoy me tocó jugar y convertir con el plantel de Primera. Estoy muy feliz. Mi familia me apoya y está tan contenta como yo”.

Además, el juvenil explicó cómo se sintió a lo largo del encuentro:

“Al principio me sentí un poco nervioso, pero con el pasar de los minutos fui ganando confianza y pude ayudar al equipo. En Boca todos pelean por jugar: hoy me tocó a mi y estoy muy feliz”.