Marcelo Gigante, entrenador de Boca Río Uruguay Seguros, habló del presente del equipo y se mostró cauto respecto de la definición de los cuartos de final.

La vuelta de Boca Río Uruguay Seguros a los entrenamientos el martes fue en un ambiente de alegría por los dos triunfos obtenidos de local ante Sarmiento Santana Textiles. El plantel aprovechó para distenderse con música y alegrarse ante la vuelta al trabajo con pelota de Agustín Ramonda, quien no formó parte del equipo en los últimos tiempos debido a un desgarro en el hombro.

Sin embargo, a la hora de entrenar, la seriedad se adueñó del Polideportivo y luego de los trabajos de pesas, elongación y kinesiología, Marcelo Gigante se tomó un momento para analizar lo sucedido en lo que va de la serie y hacer su proyección a futuro. Recordamos que las victorias obtenidas en La Bombonerita dejaron al Xeneize a sólo un paso de la clasificación a semifinales: de ganar uno de los duelos en Chaco, Boca accederá a la próxima ronda.

A pesar del presente esperanzador, el entrenador boquense no se confía y espera otro encuentro durísimo. No obstante, expresa su confianza en el equipo de cara al partido del sábado.

– ¿Pudiste dormir?

– La verdad que siempre después de un partido no puedo dormir, la tensión es mucha durante el evento y es difícil descansar la mente, pero en este caso me dormí, estaba agotado.

– Más allá del resultado, ¿quedaste conforme con el rendimiento del equipo?

– Creo que si nos conformamos con el rendimiento no vamos a mejorar nunca porque así estaría bien. La verdad que el resultado fue apretado, como esperábamos. Creo que tenemos que mejorar la continuidad de nuestro juego, ya que jugamos bien por ratos y por momentos mal, y hablo de errores no forzados que no deberíamos cometer; los errores forzados por el rival no me preocupan.

– Ricardo Ferreiro jugó varios sets cuando casi no había tenido cancha en todo el torneo, Alejandro Toro había salido del equipo y volvió en un gran nivel, Agustín Ramonda cuando jugó cumplió… ¿Te deja tranquilo saber que podés contar con todo el plantel cuando lo necesitás?

– Yo estoy tranquilo porque sé que estos jugadores dejan todo en cada entrenamiento y, por ende, sé que puede jugar cualquiera en cualquier momento. La humildad y la predisposición de estos muchachos es absoluta y todos son participes en diferentes roles de la victoria.

– ¿Dónde radicó la virtud de tu equipo para ganar estos dos partidos entre rivales que parecen no sacarse diferencias en el juego?

– La virtud es que somos conscientes de que podemos ganar jugando en equipo y no cada uno por su lado, eso es lo más importante. Después, podemos hablar de lo técnico-táctico y lo físico, pero si no hay unificación de criterio es difícil.

– Ahora que tienen ventaja deportiva de cara a los próximos partidos, ¿las dos victorias dan tranquilidad o responsabilidad?

– No pensamos en la ventaja de dos partidos, pensamos en mejorar lo que se hizo mal y en jugar al 100% de nuestras posibilidades cada partido. Sabemos que no va a ser fácil como ya sucedió y estamos preparados. Nosotros no subestimamos ni sobrevalorizamos a nadie. Para nosotros todos los rivales merecen el respeto justo.

– ¿Cuál es el secreto de un equipo que no está considerado dentro de los poderosos y que siempre termina en la disputa de cosas importantes?

– Si hablamos de lo poderoso por lo económico estamos lejos de otros equipos, pero como organización estamos a la altura de los mejores y creo que eso hace que el rendimiento colectivo sea superior a lo esperado. Tenemos una filosofía de trabajo hace unos años que nos da resultado, sobre todo en el rendimiento individual y por consecuencia, en el de equipo.

Con miras al próximo encuentro, el equipo se entrenó ayer por la mañana y a la noche emprendió el viaje rumbo a Resistencia, Chaco, donde el sábado desde las 21.30 enfrentará a Sarmiento Santana Textiles en el tercer partido de los cuartos de final.