A seis meses de su salida, el lateral habló de su presente y añoró jugar en Boca con Riquelme. Además, contó cómo fue la charla con Bianchi después de la expulsión ante Newell’s.

En diálogo con el Diario Olé, Clemente Rodríguez expresó sus sensaciones acerca de este último semestre:

Al principio fue un poco duro. Cuando terminé acá estuve casi dos semanas parado, sin hacer nada, y cuando llegué a Brasil querían que jugara desde el primer partido. Necesitaba unos días para agarrar un poco de ritmo, pero ellos me necesitaban y querían que jugara sí o sí. Lo hice en un par de partidos, los primeros, pero fue cambiando la cosa. Terminé yendo al banco estos últimos meses, hace como tres que no juego”.

Si bien ve con buenos ojos un posible retorno al fútbol argentino, sabe que es muy complicado regresar a la institución de la Ribera:

“Yo puedo jugar de 3 o de 4, en Boca también lo hice. Me gustaría volver a jugar con Román, pero es difícil, porque me fui hace poco por unas cosas por ahí que tuve. Y la vuelta ahora es muy rápido. Para otro club puede ser, para Boca creo voy a tener que esperar un poco más”.

Además, se refirió a la salida de varios ídolos de Boca y en particular a la renovación de contrato de Juan Román Riquelme:

“Creo que Boca en estos últimos años cambió mucho. Hay jugadores que se fueron mal del club, algunos que eran ídolos y no se fueron bien. Eso no es bueno. Y siendo Román, no tienen que pensar cómo va a jugar estos seis meses. Román le ha hecho ganar un montón de cosas a Boca, es un gran jugador. Le quedan seis meses de contrato, que le renueven por uno o por dos, que esté tranquilo y que se quede en el club”.

Desde Brasil, siguió la campaña del equipo y fue optimista de cara al próximo año:

“Miro todos los partidos que pasan por la tele y me fijo por Internet. El hincha de Boca se tiene que acostumbrar a los tiempos que no son tan buenos. Tiene que estar tranquilo y pensar en el año que viene, el equipo que arme Carlos va a ser el mejor y esperemos que le pueda ir bien y salir campeón”.

Sobre el cierre, recreó el diálogo que mantuvo con Carlos Bianchi luego de la expulsión ante Newell’s, por el partido de vuelta de los cuartos de final de la Copa Libertadores:

“Me dijo que soy grande y que no me puedo hacer echar así. “Si vos te parás en la calle y hay un policía, ¿vos te vas a hacer el malo con él?”. Yo le dije que no. “Y no, porque te va a llevar preso”, me dijo. “Si lo pecheas al árbitro, el árbitro te va a echar”. Y tiene razón…