En menos de diez días se llevarán a cabo las elecciones en Boca y el 3 de diciembre, los socios elegirán a su nuevo presidente. Este suceso en La Bombonera marcará el futuro de la institución, ya sea para el futuro del estadio y el proyecto futbolístico. Dentro de este aspecto, habrá un nuevo DT y a la espera de los comicios, la danza de nombres presenta a muchísimos candidatos. Algunos de ellos con pasado en el club y teniendo en cuesta este dato, el que más fuerza tomó recientemente es el de Guillermo Barros Schelotto. 

No es la primera vez que el Mellizo aparece en el radar del Xeneize. Anteriormente, en cada cambio de cuerpo técnico, estuvo en la carpeta del club y las negociaciones podrían comenzar una vez finalizados los sufragios en Brandsen 805. Su pasado como futbolista y entrenador, en el que supo conseguir varios títulos, claramente le abren las puertas a una segunda experiencia. Los hinchas también se expresan por su regreso y la postura del ex Gimnasia estaría más que clara.  

De acuerdo a la información que brindó Claudio Civello en TyC Sports: “Si a Guillermo lo llama Riquelme, agarra”. Sin embargo, el oficialismo tendría otro plan de cara al futuro: sus intenciones serían las de contar con un director técnico que no sea ídolo del cuadro de la Ribera. Más allá de este panorama, la predisposición y la relación existente con Juan Román Riquelme, excompañero suyo en la época dorada del club, no le baja las persianas a una posible llegada. 

Lo mismo sucede con la oposición. El “7” que supo ganarse los aplausos de los hinchas tiene un vínculo más cercano con Mauricio Macri, quien supo ser el presidente en su llegada como jugador. Con la participación del ingeniero en las elecciones, Guillermo también puede estar entre los candidatos. Justamente, el ex Jefe de Gobierno porteño ha resaltado sus ganas de tener en el banco de suplentes a una persona que sea del riñón del conjunto azul y oro, y ese candidato ya tiene nombre y apellido: Martín Palermo

Mientras tanto, está a la espera del resultado de las elecciones, pese a que no es la primera opción en las dos fórmulas que buscarán el triunfo en las urnas. Lo que puede favorecerlo en esta carrera por el sucesor de Jorge Almirón es su actualidad. Tiempo atrás, se dio su salida de la Selección de Paraguay y al estar sin trabajo, corre con cierta ventaja a la hora de gestionar. Pero, el vencedor no debe dormirse en los laureles dado que también cuenta con otras ofertas en la mesa. 

Recientemente estuvo vinculado a la Selección de Chile, quien también está en la búsqueda de un nuevo cuerpo técnico y el Mellizo fue ofrecido junto a Almirón, quien se marchó de manera repentina tras la dura derrota ante Fluminense en la final de la Copa Libertadores. En caso de llegar a la Roja, sería su segunda experiencia en un seleccionado. Con el combinado guaraní estuvo dos años y su etapa se dio en septiembre de este año por malos resultados. 

En total dirigió 17 encuentros pero los números no fueron muy positivos. Tan solo cosechó cuatro triunfos, igualó en otros 4 cotejos y cayó en los 9 restantes. Aunque estas estadísticas no fueron un impedimento para que otros clubes del fútbol argentino como Racing Club consulten por el Mellizo, quien finalmente rechazó la oferta. Con el paso de los días, el panorama comenzará a esclarecerse. ¿Tendrá una nueva etapa en el club donde supo ser campeón del mundo? 

Encuesta ¿Guillermo Barros Schelotto debe ser el DT de Boca en 2024?

¿Guillermo Barros Schelotto debe ser el DT de Boca en 2024?

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¿Qué clubes dirigió Guillermo Barros Schelotto? 

Luego de su paso como futbolista, el Mellizo siguió ligado al fútbol, esta vez en el rol de DT. Su carrera comenzó en 2012 y pasó por Lanús, Boca, Palermo (Italia), Los Ángeles Galaxy (Estados Unidos) y la Selección de Paraguay. 

¿Cómo le fue a Guillermo Barros Schelotto en Boca? 

Guillermo Barros Schelotto fue el técnico de Boca desde marzo del 2016 en lugar de Rodolfo Arruabarrena y su etapa duró hasta diciembre del 2018. Ganó 65 partidos, empató 29 y perdió 23. Durante sus dos años en el Xeneize, consiguió dos títulos locales y llevó al club a una final de Copa Libertadores.