El delantero reconoció, en diálogo con Radio La Red, que a Boca le faltó tranquilidad para poder quebrar a Racing con dos hombres más y que el empate no conforma.

Nicolás Blandi analizó el partido contra Racing y el presente que encuentra a Boca cerca de obtener un título, algo que no logra desde el Apertura 2008.

Con respecto a eso, el delantero se mostró cauteloso pero consideró:

“Llevamos una ventaja importante y sabemos que si hacemos las cosas bien, depende solamente de nosotros. Confiamos en lo que somos, trataremos de seguir trabajando para mantenernos en la misma senda.”

Por otra parte, analizó el partido de ayer y admitió que se fueron con bronca por no poder ganar:

“Era una linda oportunidad para despegar. Antes del partido era positivo empatar, ahora da un poquito de bronca más que satisfacción.”

“La ansiedad nos jugó en contra. Teníamos dos hombres más y la victoria al alcance de la mano y nos desordenamos un poquito. No tuvimos la pausa que hacía falta.”

“Saja tuvo un gran partido, clave para ellos para llevarse el empate.”

Sobre el golpe que lo obligó a salir lesionado, explicó:

“Estaba en el piso y sentí golpes fuertes, innecesarios totalmente. Quería levantarme y sentía golpes. Es un partido de futbol en el que cada uno defiende sus colores a muerte. Intenté seguir, pero me di cuenta que no podía.”

“Me dolía tanto que no pude ver quién me pegó, ni si el árbitro sacó tarjeta. Si el árbitro vio la jugada, se habrá dado cuenta que lo tendría que haber echado.”

“Hoy no sabría decir si puedo jugar el próximo partido, pero no puedo hacer nada. Estoy en casa con la familia descansando. Veremos mañana cómo me siento, esto es reciente.”