El preparador físico respondió a las críticas y respaldó sus formas. “Nuestra tasa de lesiones es muy similar a la del resto del fútbol argentino”, agregó.

En diálogo con Rock and Closs (FM 95.9), Juan Manuel Alfano contó cómo vive este momento:

Nos quita el sueño y nos da dolores de cabeza esta situación. Obviamente lo hablamos, intercambiamos opiniones porque tener la mejor salud del plantel nos ocupa. Hay que ir para adelante y trabajar”.

“Analizando nuestra situación, ante cualquier mínimo dolor o advertencia, el jugador es parado por las dudas”.

Además, comparó la situación con la del resto de los clubes:

“Nuestra tasa de lesiones es muy similar a la del resto del fútbol argentino. Nosotros tenemos la estadística”.

La metodología de trabajo no tiene correlación con las lesiones. Estas situaciones anómalas nunca las había vivido, es la primera vez que me pasa. Si ese fuese el problema, bienvenido sea, porque sabríamos qué ejercicios son los que perjudican a los futbolistas y no los haríamos más”.

Además, explicó que las lesiones se dan más que nada en el partido:

“En el entrenamiento, como los trabajos son más bien cíclicos, la probabilidad de lesión es mucho menor que en un partido. El 80 o 90% de las lesiones son durante el partido, cuando hay un montón de imponderables y efectos impredecibles en las situaciones de juego”.

“El alto rendimiento, a alta intensidad, cuando dos equipos van al límite, estamos expuestos a este tipo de percances”.

En particular, se refirió a las lesiones de Fernando Gago y Juan Sánchez Miño y sus sendas recuperaciones:

“Sánchez Miño sufrió un golpe en la práctica del jueves y el domingo jugó con eso. Después desembocó en el desgarro”.

“En estos casos hay que ser positivo y optimista con la recuperación. No hay que utilizar los extremos. Faltan 5 semanas para el cierre del campeonato”.

“Lo mejor para Fernando va a ser lo mejor para el equipo y, por ende, para la Selección”.

Tenemos que seguir estando atentos. Sánchez Miño se lesionó tras un golpe, Gago tuvo esas lesiones recurrentes sin ningún tipo de advertencia”.

Sobre el cierre, resaltó que esta situación anormal puede condicionar a los futbolistas del plantel:

“Con la gran cantidad de lesiones, el jugador y su alrededor tienen miedo de que ocurra cualquier cosa. El factor mental influye mucho. Cuando hay una exagerada tensión psicológica, pueden darse las lesiones. Si se detectan esos pensamientos negativos, hay que dar apoyo”.